sábado, 24 de julio de 2010

Ni clasismos ni jerarquías y menos burocracia.

Ni más ni menos que el buen funcionamiento de la Sanidad pública está en nuestras manos, las manos de las personas que trabajamos en ella, y también, por qué no, en la de los/as usuarios/as. Y, para ello una de las malas costumbres a desterrar sería el clasismo.

En este caso, hablemos del clasismo que sostienen algunos/as médicos/as, (salvo honrosas excepciones).

Bien, estas personas que por haber estudiado una carrera como es medicina, una carrera que se estudia en lo público, y la que todos/as las/os contribuyentes hemos pagado, nos miran por encima del hombro creyéndose superiores a los/as que no la hemos estudiado. Que decir si se trata de un simple “hola” cuando nos cruzamos por los pasillos, ascensor, vestuarios, etc…

Pues bien, estas personas que nos consideran como de otra clase de rango inferior, o eso parece, ¿de qué clase son ellos y ellas?, ¿no somos todos y correspondemos todas a la clase trabajadora?. ¿Por tener unos más conocimientos en un tema y otras en otro somos superiores e inferiores entre nosotros/as?. ¿O acaso todas y todos nos tendríamos que mirar por encima del hombro por tener y hacer distintos cometidos, responsabilidades u obligaciones?.

Pues si es importante saber diagnosticar la enfermedad de una persona y saber cuales son las maneras para atajarla; igual de importante es la amabilidad, el respeto y el buen trato hacia esta persona.

Estos/as médicos/as, que con su actitud (repito, salvo honrosas excepciones), dejan entrever que clase tienen, deberían ser, por su carrera médica, todo lo contrario, deberían ser humildes, respetuosos, y como su carrera parece exigir, todo corazón; pero desgraciadamente no parece o no suele ser así, y, por el contrario, parece que han estudiado dicha carrera para poseer determinados privilegios y un mayor estatus social y económico.

¿Será por ese estatus que se otorgan, que su jornada de trabajo, que es la misma que la de cualquier otro u otra trabajadora del sector sanitario, la cumplen a su antojo, incumpliendo el horario, trabajando deprisa y, en muchos casos mal; no teniendo en cuenta jamás, o salvo raras ocasiones, la opinión de los y las pacientes (mejor dicho, se les tiene tan poca consideración que, para que no den su opinión, ni se les pregunta); se les informa mal y con palabras incomprensibles para estos y estas (más bien porque no entienden, ni tienen por qué entender de palabros técnicos de la medicina)?.

¿Podría ser que esta falta de profesionalidad fuese enfocada hacia la privatización?. Pues si seguimos analizando el asunto, no de una manera profunda, que daría para mucho más, sino de una manera superficial; ¿Quiénes serían los y las inmediatamente interesadas en que la sanidad se privatizase?, ¿no serían las consultas médicas privadas una de las partes interesadas?. De hecho, esto de aquí expuesto, ya se viene haciendo, pues hay médicos y médicas que trabajando en lo público, poseen consultas privadas, a las que se derivan pacientes (o bien cobran directamente al paciente, o bien cobran un tanto por ciento a la seguridad social).
El mayor exponente de esta situación lo encontramos en los hospitales concertados; estos también derivan las pruebas caras que se tengan que realizar al paciente, a lo público, y el diagnóstico, medicación, ingreso e intervención, se realiza por lo privado y así el negocio; al igual, operaciones han sido y siguen siendo derivadas desde los hospitales públicos a los hospitales concertados. Estas operaciones se hacen por lo público, pero son realizadas por médicos/as que pudiendo hacerlo en su turno normal de trabajo, realizan peonadas, operando a destajo, tirándose largas horas en los quirófanos, con el desgaste físico y mental que ello supone, y cobrando barbaridades por estas excesivas jornadas laborales.

He llegado a ver a un médico que metiéndose en el quirófano a realizar operaciones a las 8:00 am, eran las 18:00 pm y, sin descanso, seguía operando, y no es que fuese una operación larga, NO, fueron muchas, más de 8, operaciones cortas y seguidas.

En esto y en más se deja sentir la profesionalidad de gran parte de este sector, que en teoría, todos y todas las trabajadoras de este ramo, debemos o deberíamos tener.

Tanto es así y tan sabido es por este sector el mal desempeño de las funciones que corresponden a cada trabajador y trabajadora (sea por exceso de deberes o por dejadez), que cuando tienen a un familiar querido ingresado sufren casi más por el trato que, supuestamente, va ha recibir (y si recibe buen trato es porque se ha corrido la voz de que es familiar de un o una médico), que por la enfermedad de la persona en sí.

todos/as somos de la misma clase
y todas/os seremos atendidos/as por una misma clase:
¡¡¡LA CLASE TRABAJADORA!!!


Salud a todas y a todos!.

martes, 13 de julio de 2010

CIERRE DE CAMAS Y PACIENTES FUERA.

CIERRE DE CAMAS PARA EL VERANO DEL 2010.

* Hospital Nacional de Parapléjicos: se cierra, durante todo el verano, 90 camas.
* Hospital “Virgen de la Salud”: Se cierra; en el mes de julio 72 camas; en la primera quincena de agosto 94 camas, y en la segunda quincena 116 camas; en el mes de septiembre 58 camas.
* Hospital “Virgen del Valle” (Geriátrico): Se cierra; en la primera quincena de julio 29 camas, y en la segunda quincena 50 camas; en el mes de agosto 50 camas; en el mes de septiembre 29 camas.

HOSPITALES CONCERTADOS.

El personal de estos hospitales es de gestión privada (aunque en casos va gente cedida por la pública), pero tiene una serie de servicios públicos, es decir, un número de camas están asignadas a la sanidad pública. Por estas camas, el ministerio de sanidad paga un "alquiler". Pongamos por ejemplo que el coste de estas camas sea de 300 € al día, pues el hospital las cobra a 350€, así la entidad privada gana dinero.

Estos Hospitales son:
* Hospital “tres culturas”.
* Hospital “provincial”.
* Hospital “del rosario”.

Pues bien, en estos hospitales también se han cerrado camas; claro está, estas han sido de las cedidas a lo público, no de lo privado, esto no crearía negocio.

En el mes que menos camas se cierran es en septiembre con 177, y en el mes que más camas hay cerradas es en la segunda quincena de agosto con 256 (sin contar con las cerradas en los concertados). ¿Qué pasará con las personas que podamos necesitar de un ingreso urgente?, ¿Qué habrá pasado con las personas ya ingresadas, que por falta de camas no han podido ser recolocadas?. Fácil es pensar que: o bien han recibido el alta prematura, queremos decir, sin estar totalmente recuperadas (así se observan en recaídas),o bien tendrán que buscar sitio en una privada (y así pagar una segunda vez por un servicio que ya la corresponde por su pago a través de impuestos y/o cotización a la seguridad social), esto último se conoce como COPAGO(1).

- Estas plantas y/o camas que se cierran, bien sea por todo el verano o por algún mes, se nos dice que es para su remodelación de pintura y algún que otro arreglo.- Bien, es obvio que hay que arreglar lo roto y pintar lo sucio, sobre todo por higiene, ¿pero porqué no se hace causando el menor trastorno al público?, ¿no sería mejor arreglar y pintar habitación por habitación que cerrar toda una planta?, y, en el caso que esto no pudiera hacerse ¿no sería mejor cerrar y arreglar primero una planta y luego otra?, y, ¿primero en un hospital y luego en otro?, así bastantes de estos y estas pacientes se podrían recolocar en otras habitaciones y sería menor el daño. ¿Porqué se pintan y arregla todo a la vez?, (sabido es que en más de una ocasión se han pintado habitaciones sin cerrar la planta). Parece ser, o dejarse entrever, que haya otro interés creado o con afán de crearlo.

Y la verdad es que, observando como Hospitales de todo el territorio del Estado Español, y como mayor exponente en la ciudad vecina (Madrid), se han y se están privatizando; como muchos servicios precisan ya de copago; y como en Toledo se están privatizando algunos sectores, recientemente la Lavandería, que por cierto se está viendo que funciona bastante peor. Y quizás sea menos higiénica por interés de la empresa: más recortes menos gastos más beneficios.

Pues este interés parece presentarse con claridad.

Sin más y sin otro motivo que hacer pública esta situación para con ello contribuir a su observación y mejora.

Salud a todos y a todas.

(1) Ley 15/97 DE “Nuevas Formas de Gestión en la Sanidad” permite que la gestión y administración de los centros sanitarios pueda llevarse a cabo a través tipo de entidad admitida en derecho, así como que la prestación y la gestión de los servicios sanitarios pueda ser realizada por cualquier tipo de entidad privada y lucrativa.